El ejército ucraniano no está involucrado en la explosión de la cisterna de nitrógeno en Rubizhne, en la región de Lugansk, el 9 de abril, como afirman los medios rusos. La cisterna de nitrógeno en la ciudad fue volada por segunda vez por el ejército ruso, según el jefe de la Administración Militar Regional de Lugansk, Sergii Gaidai. La explosión de productos químicos en sus posiciones no le da al ejército ucraniano ninguna ventaja táctica. El ejército ucraniano no planea abandonar sus posiciones en Rubizhne.
Los medios rusos afirman que las Fuerzas Armadas de Ucrania el 9 de abril en el territorio de la planta Zorya en Rubizhne, en región de Lugansk, explotaron una cisterna con ácido nítrico. Así lo informaron los medios de propaganda rusa Interfax, Regnum, Radio Sputnik, VKpress, Izvestia y otras. El principal argumento, según los medios rusos, es el hecho de que el ejército ucraniano supuestamente se retiró de la ciudad y finalmente realizó una explosión. Pero las Fuerzas Armadas de Ucrania no van a ceder sus posiciones y no han volado la cisterna de nitrógeno. Eso confirmó el jefe de la Administración Militar Regional de Lugansk, Sergii Gaidai.
Los medios citan la declaración de Luganskinformcenter de que la explosión fue hecha por “los batallones de nacionalistas”. Además, el primer vicepresidente del Comité de Ciencia y Educación Superior de la Duma Estatal de Rusia, Alexander Mazhuga, dijo que “las fuerzas ucranianas, al retirarse de la ciudad, por sus temerarias acciones crearon un peligro para la población civil”. Los canales de Telegram pro-Kremlin incluso afirmaron que la explosión de nitrógeno en Rubizhne supuestamente habría sido confirmada por el mismo Gaidai; más tarde estos mensajes fueron editados. Aunque él había dicho lo opuesto, que los rusos explotaron la cisterna con químicos. Según Gaidai, el día anterior a la explosión de nitrógeno, el ejército ruso llevó a cabo un ataque terrestre masivo en Rubizhne, pero fue repelido por el ejército ucraniano. Como resultado de este ataque, varios tanques rusos y vehículos blindados de transporte de personal fueron derribados y murieron hasta 50 militares rusos. Lo que indica que el ejército ucraniano no ha dejado su posición.
Además, en vísperas de las explosiones, el 8 de abril, se sabía que las tropas rusas intentaban capturar Novotoshkivske, bombardearon Severodonetsk, Rubizhne, Novodruzhesk, Lysychansk, Popasna, Zolote y Girske, pero el ejército ucraniano repelió esos ataques de los rusos.
Inmediatamente después de la explosión de la cisterna de nitrógeno el 9 de abril, Sergii Gaidai confirmó que las tropas rusas habían detonado unas 3 toneladas de ácido nítrico. Según Gaidai, durante un mes y medio el ejército ruso no ha podido abrirse paso en dirección a Lugansk. Por lo tanto, no se trata de ninguna capitulación, rendición de la ciudad ni retirada de las tropas ucranianas.
La explosión de nitrógeno en Rubizhne el 9 de abril, según estimaciones preliminares, tuvo una zona de daño de no más de 550 metros, lo que no otorga ventaja táctica alguna al ejército ucraniano, pero crea problemas para el mantenimiento de la ciudad. Debido a la dirección del viento, que es difícil de predecir, el vapor explosivo de la cisterna con ácido nítrico se extendió en el área de las posiciones rusas cerca de Kudryashivka y Varvarivka. Aquí se ve en el mapa: