El canal de televisión ruso que pertenece al Ministerio de Defensa, Zvezda, y otros noticieros propagandísticos difundieron una noticia falsa de que las Fuerzas Armadas de Ucrania suministran municiones químicas a los países del Medio Oriente. Y los supuestos suministros están controlados por un batallón islámico que cuenta con 500 combatientes.
La fuente de la información fue un líder de la república autoproclamada de Donetsk, Eduard Basurin.
“Nosotros hemos detectado la llegada a Mariúpol del batallón islámico que cuenta con 500 personas. Su tarea es guardar los almacenes con armas; misiles y artillería, además controlan el puerto de Mariúpol, que se ha convertido en un lugar de comercio ilegal de armas, incluyendo las municiones químicas”, dijo Basurin.
La falacia sobre un batallón islámico y suministros de municiones químicas fue difundida por NTV, RBC, VZ.ru, News Front, y otros.
Ucrania firmó la Convención sobre la Prohibición de las Armas Químicas en 1993 y la ratificó en 1998. La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas está vigilando que la Convención sea cumplida. En el último informe de la Organización hay una lista de los países que aún mantienen el armamento químico o tienen los objetos de la producción de las armas químicas. Pues, Ucrania no está en estas listas.
¿Qué es lo que tienen en mente cuando dicen “el batallón islámico”? Al parecer se trata de una formación civil “Asker”, en la que entran los tártaros de Crimea. El Ministerio de Defensa de Ucrania ahora está considerando que esta formación forme parte de las Fuerzas Armadas de Ucrania, pero aún no ha cumplido esta promesa.
Sobre esto en abril de 2017 en una entrevista para Glavcom dio declaraciones un representante de los tártaros de Crimea, Lenur Islamov. Hasta ahora la formación civil “Asker” controla los puntos de control entre Crimea y la región de Jersón.