El diario ruso Moskovsky Komsomolets informó que Ucrania está al borde de “una hambruna energética”. Según el noticiero, Ucrania se verá obligada este año a cerrar centrales nucleares debido a la falta de combustible. Los autores citan al doctor de ciencias técnicas Igor Ostretsov, quien afirma que las plantas de energía nuclear de Ucrania pronto sufrirán debido a la escasez de combustible.
La noticia también fue publicada por Sputnik, Yandex y NewsFront.
“Temo que ya empezará en este año. Comenzará el cierre de las plantas”, dijo Ostretsov.
De hecho, la afirmación de que Ucrania sufre la escasez de combustible para las centrales nucleares no es cierta. Primeramente, la Compañía Nacional de Generación de Energía Nuclear Energoatom tiene un acuerdo con Westinghouse y con una empresa rusa del ciclo del combustible nuclear, TVEL, sobre los suministros de combustible. Al mismo tiempo, la proporción del combustible de la compañía estadounidense está aumentando, mientras que la proporción del combustible ruso está disminuyendo. De acuerdo con el tratado adicional, Ucrania comprará combustible de la TVEL hasta 2025, después cambiará completamente a sus contrapartes occidentales.
Segundo, en un acuerdo con Westinghouse, se estipula que ya en 2021, la mitad o más de las unidades de energía en Ucrania funcionarán con combustible estadounidense. Además, el acuerdo prevé que en caso de fuerza mayor (el cese completo de los suministros de combustible de Rusia), la empresa puede seguir facilitando combustible a los 13 bloques de reactores de agua-agua ucranianos. También se creó el almacenamiento de combustible para un funcionamiento sin problemas durante un año.
El servicio de prensa de la compañía Energoatom informa que, de acuerdo con los resultados del último análisis de las necesidades de las centrales nucleares de Ucrania para el combustible nuclear para las unidades de energía de reactores de agua-agua y pequeño reactor modular (tipo 160), lo que prevé los contratos con la TVEL y Westinghouse será suficiente a largo plazo. En 2030 habrá necesidad de un tercer proveedor; sin embargo, en 2040 se espera un excedente de uranio en el volumen de 764 toneladas por año, lo que permitirá comenzar a exportar uranio al exterior.
La declaración de los propagandistas rusos de que pronto aparecerá una escasez de uranio en el mercado mundial tampoco es cierta.
El medio Atomic Expert señala que “independientemente del papel que la energía nuclear desempeñará en futuro para satisfacer las necesidades de electricidad, las reservas de uranio serán más que suficientes para capacitar la demanda prevista en el futuro previsible”.
Ucrania es uno de los líderes en la producción mundial de uranio. Alrededor de 1000 toneladas de concentrado de uranio se producen anualmente en Ucrania (por ejemplo, en 2015 se produjeron 1200 toneladas), que es aproximadamente el 40% de las necesidades anuales de combustible. El resto (aproximadamente 1,5 mil toneladas) se compra anualmente a productores estadounidenses, kazajos y rusos. Por ejemplo, en noviembre de 2018, la compañía Energoatom firmó un acuerdo sobre el suministro de concentrado de óxido de uranio en 2019 con la compañía nacional kazaja Kazatomprom.
El artículo de Moskovsky Komsomolets además afirma que “el nivel de operación de las centrales nucleares de Ucrania es muy bajo». No obstante, no han presentado ni evidencias ni prueba alguna para tal afirmación.
Por el contrario, las inspecciones realizadas por comisiones internacionales confirmaron la seguridad de las centrales nucleares de Ucrania. En particular, en 2017 el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y la Asociación Mundial de Organizaciones que Operan Plantas de Energía Nuclear confirmaron que las centrales nucleares de Ucrania son objetos seguros. La seguridad de las plantas nucleares también ha sido verificada repetidamente por la Inspección Reguladora Nuclear Estatal de Ucrania.
Por su parte, Energoatom informó que, durante el año pasado, no fueron registrados aumentos del nivel de radiación en las centrales nucleares de Ucrania. También el año pasado, la compañía llevó a cabo 14 reparaciones preventivas programadas, de las cuales 5 fueron principales y 9, medianas.