El 17 de julio los medios de comunicación pro-Kremlin informaron que Rusia no tiene la culpa del asesinato de Anna Politkovskaya, la periodista de Novaya Gazeta que fue conocida por su posición anti-Putin. Supuestamente, el hecho fue confirmado por la decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Tal información fue difundida por Life.ru, Rambler, Ren TV y RIA Novosti. Los medios citaron el comunicado del Ministerio de Justicia de Rusia, que afirma que, según el TEDH, las autoridades de Rusia no son culpables del asesinato de la periodista en 2006 y que tal decisión supuestamente fue hecha el 17 de julio de 2018.
El comunicado dice que “el TEDH no estuvo de acuerdo con el argumento de los demandantes de que era necesario imponer la responsabilidad a la Federación de Rusia por la privación de la vida de Politkovskaya, y declaró que la queja en esta parte es inadmisible”.
Además afirman que el TEDH reconoció como «competente» la investigación del asesinato de Anna Politkovskaya realizada por las fuerzas de seguridad rusas.
Toda la historia de los medios pro-Kremlin resultó ser un fake.
El 17 de julio en el sitio web oficial del Tribunal Europeo de Derechos Humanos apareció el texto de la decisión, según la cual el gobierno ruso es acusado de violar el artículo de la segunda Convención Europea para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales que garantizan el derecho a la vida.
En realidad, el TEDH obligó a Rusia a pagar una indemnización moral a los familiares de Politkovskaya de 20 mil euros. Los solicitantes en el caso fueron la madre, Raisa Mazepa, la hermana, Elena Kudimova, y los hijos de Anna Politkovskaya: Vera Politkovskaya e Ilya Politkovskiy.
Además, el TEDH culpó a las autoridades rusas de una investigación ineficaz sobre el asesinato de la periodista. El Tribunal destacó que la investigación encontró a cinco personas involucradas en el asesinato, pero no determinó exactamente el cliente del asesinato de la periodista.
«El Tribunal subraya que la investigación del caso arrojó resultados tangibles, ya que condujo a la condena de cinco personas directamente responsables del asesinato. Al mismo tiempo, el Tribunal considera que la investigación del asesinato por contrato no puede considerarse adecuada (…) debido a la ausencia de medidas de investigación reales y serias para determinar al autor intelectual del crimen, es decir, la persona o personas que ordenaron el asesinato», explica el documento del TEDH.
La decisión del tribunal subraya que, durante la investigación, las autoridades rusas no tuvieron en cuenta la posibilidad de que el asesinato podría haber sido realizado por razones políticas, debido a las actividades profesionales de Anna Politkovskaya. Además, el TEDH dictaminó que Rusia no prestó atención a la posible participación en el crimen del líder checheno Ramzan Kadyrov.
Como afirman las colegas y parientes de Politkovskaya, le dispararon dos horas antes de que enviara los resultados de una investigación sensacional sobre las torturas en Chechenia. Justo dos días antes de la tragedia, Politkovskaya dijo en una entrevista para la radio RFE/RL que estaba preparando ese material y que literalmente «sostenía las fotos» de la evidencia. La periodista rusa criticaba duramente la política del presidente ruso Vladimir Putin, escribía abiertamente la verdad sobre los acontecimientos de la guerra en Chechenia y expuso las actividades del jefe de la república, Ramzan Kadyrov. Muchos, incluso Aleksander Litvinenko —el ex funcionario ruso que fue envenenado en Gran Bretaña—, creían que la fecha del asesinato de Politkovskaya coincidió con el cumpleaños de Vladimir Putin.
Anna Politkovskaya, comprometida en actividades de derechos humanos, viajó repetidamente a las zonas de combate y los campos de refugiados en Daguestán, Ingushetia y Chechenia. El 25 de octubre de 2002 participó en negociaciones con terroristas chechenos que capturaron a unos 700 rehenes en Nord-Ost.