La “ingeniería geopolítica occidental llevó al caos” en Georgia, una oleada de “protestas rusofóbicas” e “histeria antirrusa”: los medios pro-Kremlin describen de esa manera las manifestaciones masivas en Tbilisi. Las protestas en el país comenzaron la noche del 21 de junio, después de lo cual la propaganda rusa explotó con una enorme ola de noticias manipulativas y francamente falsas sobre este tema. Los políticos rusos acusaron inicialmente a las autoridades georgianas de organizar los disturbios y dijeron que las protestas no fueron más una «provocación» contra la delegación de Rusia, que acaba de llegar de visita a la capital de Georgia, Tbilisi. Luego, los primeros funcionarios estatales de Rusia acusaron a Occidente de organizar el caos en el país, como era de esperar entre los «acusados» estuvo Ucrania.
RT en ruso citó al jefe del MAE de Rusia, Sergey Lavrov:
«Otro ejemplo de las consecuencias de la ingeniería geopolítica, en la que participan nuestros colegas occidentales, es Georgia, donde los curadores occidentales están listos para cerrar los ojos ante los excesos de los ultranacionalistas: la rusofobia, solo para romper todos los lazos de la gente de Georgia con nuestro país, reescribir nuestra historia común (…) (Ucrania) es un país con un enorme potencial; bajo el régimen de (el presidente Petro) Poroshenko fue relegada al estado de los solicitantes de asistencia internacional, perdió su base industrial, todavía sufre de una gran salida de la población en edad de trabajar, sin hablar del conflicto interno y de una división de la sociedad a lo largo de líneas espirituales y civilizacionales».
Es una narrativa frecuentemente utilizada por la propaganda rusa: la influencia fatal de Occidente, de la UE, los EE.UU. o incluso de Ucrania en la política interna de otros países, en este caso se trata de Georgia. No obstante, los medios de desinformación rusos no mencionan la verdadera razón de las protestas en Tbilisi.
El descontento de la gente fue causado por la visita de la delegación rusa a Georgia para participar en la Asamblea Interparlamentaria de Ortodoxia. El jefe del grupo de diputados rusos, el representante de los comunistas Sergey Gavrilov, inauguró la reunión sentado en la silla del presidente del parlamento georgiano; tal acto del diputado ruso causó indignación entre los diputados georgianos. Después de eso, los diputados de la oposición bloquearon la tribuna, lo que no permitió que la delegación rusa regresara a la sala de reuniones. La delegación rusa abandonó el edificio acompañada por guardias, e indignados activistas civiles inundaron los corredores parlamentarios.
Además, representantes de la oposición y activistas informaron que el comunista Gavrilov es partidario de la ocupación rusa de Abjszia y de la región de Tsjinvali del país (la llamada Osetia del Sur) que ocurrió con la participación de Rusia en agosto de 2008. Los manifestantes dijeron que se oponen a la llegada de delegaciones rusas similares al país, exigieron reformar la legislación electoral y castigar a los representantes de las agencias policiales del país, quienes en la primera noche de protestas usaron la fuerza para tratar de dispersar la protesta. Los manifestantes dijeron que no tenían la intención de tirar la toalla hasta que se cumplieran sus demandas.
La presidenta georgiana, Salomé Zurabishvili, el 21 de junio pidió a los manifestantes la resolución de la situación con calma y paz. Sin embargo, Zurabishvili destacó que, además de la ocupación rusa de parte de Georgia, los representantes del país prohíben a las personas de etnia georgiana en las regiones ocupadas de Abjasia y de Tsjinvali restaurar iglesias y cuidar las tumbas de sus antepasados. La presidenta del país agregó que la delegación rusa «ortodoxa» es un medio de manipulación, ya que Rusia ha estado utilizando el tema religioso en sus juegos políticos durante mucho tiempo.
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Ahora las protestas pacíficas en Georgia continúan. Además, el 21 de junio, el presidente del parlamento, Irakli Kobajidze, renunció luego de un intento de dispersar la protesta con la fuerza. También el 24 de junio, las autoridades georgianas acordaron reformar la legislación electoral, diciendo que en 2020 las elecciones al parlamento del país se llevarán a cabo de acuerdo con el sistema proporcional, y no con la mezclada, como se hacía antes. Además, el Ministerio de Asuntos Internos de Georgia informó que, durante la investigación, 10 oficiales de la ley que habían participado en la dispersión de la manifestación ya han sido suspendidos.