Las acusaciones de la propaganda rusa contra el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) sobre el posible trasplante de los órganos de los niños ucranianos no fueron confirmadas por evidencias. Ninguno de los medios rusos mostró registros médicos de niños u otras «pruebas», supuestamente encontradas en la oficina de la Cruz Roja de Mariúpol. El CICR declaró que no ha recopilado tales datos de niños y que tales declaraciones son falsas.
A fines de mayo, los medios rusos y los canales de mensajería rusa de Telegram informaron que se habían encontrado más de mil registros médicos sobre órganos sanos de los niños en la oficina de la Cruz Roja de Mariúpol. No obstante, dichas tarjetas no contenían información sobre enfermedades. «Es decir, el personal de la Cruz Roja no se preocupó por la salud de los niños y realizó pruebas para detectar órganos sanos«, está escrito en un informe. Es más, el artículo del medio estatal ruso RT en español sugiere abiertamente que “estos órganos podrían ser aptos para trasplante”.
RT se refiere a un «reportaje» de Vladimir Taranenko, el líder del llamado «Escuadrón del pueblo de la RPD» (Donetsk), filmado en la oficina de la Cruz Roja de Mariúpol y publicado el 29 de mayo en su canal de Telegram. Al mismo tiempo, en el vídeo no se muestra ninguna evidencia de la existencia de registros médicos de niños y la recopilación de datos sobre órganos para trasplante.
El 29 de mayo, el Comité de Investigación de Rusia respondió de inmediato a tales informes mediáticos y declaró que «la agencia estudiará esta información y le dará una evaluación criminal». En su comunicado afirman que en la oficina del CICR «se encontraron cientos de tarjetas médicas para niños con órganos sanos marcados«.
Sobre el tema publicaron también otros medios de la propaganda rusa: Lenta.ru, IZ.ru, RT en ruso, RIA Novosti, NTV, Tsargrad y otros.
En las publicaciones de los medios rusos, la rama del CICR de Mariúpol está acusada no solo de traficar con órganos de niños, sino también de crear laboratorios biológicos ilegales y preparar un ataque químico contra el Donbás. Así afirmaron los propagandistas de Izvestia.
En realidad, los representantes del CICR negaron tales informes de los medios rusos. No obstante, los medios rusos ignoraron su refutación. En su comunicado, publicado en la página oficial de la organización el 31 de mayo, el CICR declaró que los reportajes de los medios rusos están llenos de declaraciones falsas y de suposiciones infundadas.
“Un vídeo filmado en nuestra oficina de Mariúpol –que ahora circula en algunos medios– está lleno de afirmaciones falsas y de suposiciones infundadas sobre el trabajo del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) (…). El vídeo también alega que el CICR tiene una pila de registros médicos de niños. El CICR no ha recopilado ninguno de esos registros. El vídeo también insinúa que el CICR está involucrado en el tráfico de órganos. Esta es otra acusación inequívocamente falsa”, se trata en el comunicado del CICR.
Representantes de la Cruz Roja califican de absurdas las acusaciones de preparar un ataque químico contra el Donbás y de montar laboratorios biológicos en Ucrania. Además, los miembros de la Cruz Roja de Mariúpol abandonaron la oficina de la organización el 15 de marzo y no se sabe exactamente cómo se utilizó después de su salida. A fines de marzo, el almacenamiento del CICR en Mariúpol fue destruido.