La propia Rusia no ha detenido ni un solo día sus ataques contra las infraestructuras energéticas y civiles de Ucrania, ni tras la promesa de Zelenski de poner fin a dichos ataques, ni tras la conversación de Putin con Donald Trump, durante la cual el dirigente ruso supuestamente ordenó detener los ataques contra las instalaciones energéticas ucranianas. Cada día, tras el supuesto “acuerdo para detener los ataques”, Rusia sigue lanzando más de cien drones de ataque a la vez contra Ucrania, dirigidos, en particular, contra instalaciones energéticas. Los ataques más masivos tras el acuerdo entre Putin y Trump fueron los ataques rusos contra las regiones de Kropyvnytskyi, Odesa, Zaporiyia, Donetsk, Sumy y Kyiv.
Las redes sociales y los sitios web rusos están difundiendo la información de que Ucrania y Zelenski “incumplieron el acuerdo de no ataca” instalaciones energéticas rusas. “El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenski, rompió su promesa a Estados Unidos al ordenar un ataque contra una instalación energética en el pueblo de Kavkazskaya, en el territorio de Krasnodar. Así lo declaró la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zajárova, durante una reunión informativa”, informan los medios rusos, acusando a Ucrania de un supuesto incumplimiento unilateral de sus obligaciones. Al mismo tiempo, el canal oficial de Telegram del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso subraya que “se trata de otra provocación especialmente preparada por el régimen de Kyiv con el objetivo de desbaratar las iniciativas de paz, incluidas las presentadas por el presidente de EE. Zelenski y el régimen de Kyiv han violado una vez más el acuerdo alcanzado y han confirmado así su absoluta falta de poder negociador”. En otras palabras, la parte rusa intenta trasladar la responsabilidad de los bombardeos en curso exclusivamente a Ucrania.
En realidad, esta información no es cierta. Rusia no ha detenido ni un solo día sus ataques contra la infraestructura energética y civil de Ucrania, ni tras la promesa de Zelenski de poner fin a dichos ataques, ni tras la conversación de Putin con Donald Trump, durante la cual el líder ruso supuestamente ordenó detener los ataques contra las instalaciones energéticas ucranianas.
Así, en la noche del 18 al 19 de marzo de 2025 –tras una conversación telefónica entre Donald Trump y Putin– Rusia lanzó otro ataque masivo contra Ucrania utilizando misiles y vehículos aéreos no tripulados. En concreto, lanzó dos misiles balísticos Iskander-M y cuatro misiles antiaéreos guiados S-300, así como 145 aviones no tripulados de ataque tipo Shahed. Como consecuencia del ataque, resultaron dañadas infraestructuras energéticas y civiles en las regiones de Donetsk, Sumy, Odesa, Poltava, Dnipró, Kyiv y Cherníhiv. Más información sobre el supuesto “alto el fuego” de Rusia en el artículo: Falso: Rusia derriba sus drones sobre Ucrania tras las conversaciones de Trump con Putin.
Además, en la noche del 19 al 20 de marzo de 2025, justo antes de las declaraciones del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso sobre la “no negociabilidad” de Ucrania, Rusia demostró su plena negociabilidad bombardeando masivamente la ciudad ucraniana de Kropyvnytskyi, el ataque más intenso contra la ciudad desde el comienzo de la guerra a gran escala. Como resultado de más de 30 explosiones, 70 edificios privados y 17 edificios de apartamentos resultaron dañados o destruidos. El ataque también causó heridas a 14 civiles, entre ellos 7 niños. Dos de las víctimas se encuentran en estado grave. En total, en la noche del 20 de marzo de 2025, Rusia atacó Ucrania con 171 UAV de ataque de tipo Shahed y varios tipos de drones de imitación. Como resultado de los bombardeos rusos, se vieron afectadas las regiones de Kirovograd, Sumy y Donetsk, informaron las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Además, en la noche del 21 de marzo de 2025, el ejército ruso atacó masivamente Odesa y Zaporiyia con drones de ataque. En Odesa resultaron dañadas instalaciones de infraestructura energética y civil, entre ellas un rascacielos residencial, un centro comercial y tiendas. El cementerio Novogorodske (Tairovske) de Odesa también fue atacado, lo que provocó la destrucción completa de 30 tumbas. Tres personas resultaron heridas en el ataque, entre ellas una menor. Además, al mismo tiempo, la Federación Rusa atacó asentamientos del distrito de Zaporiyia con bombas aéreas guiadas. Como resultado, cinco personas resultaron heridas, entre ellas un niño. En total, en la noche del 21 de marzo, las tropas rusas atacaron Ucrania con 214 vehículos aéreos no tripulados de ataque tipo Shahed y otros tipos de drones.
Tales ataques masivos con drones contra la infraestructura ucraniana por parte de Rusia tienen lugar todas las noches, a pesar de cualquier acuerdo entre Trump y Putin. Al mismo tiempo, Rusia tradicionalmente guarda silencio sobre sus crímenes de guerra contra la población civil y trata de echar la culpa del alto el fuego a Kyiv, aunque es Rusia el agresor en esta guerra, y Ucrania sólo está defendiendo su derecho a la soberanía. Así, en contra de sus ruidosas afirmaciones propagandísticas, Rusia incumple una vez más sus propias promesas, culpando a la víctima de su agresión. StopFake continúa refutando falsedades similares en sus artículos: Falso: Rusia derriba sus drones sobre Ucrania tras las conversaciones de Trump con Putin, Falso: Zelenski “firmó en secreto un acuerdo de recursos por 100 años con el Reino Unido engañando a EEUU”, Falso: Ucrania comenzó la guerra y se negó a negociar con Rusia.
