El 14 de junio el diario El Confidencial publicó una nota titulada “Los nuevos ‘ministerios de la Verdad’ que reescriben la historia en Europa del Este” donde trata sobre Ucrania, Polonia y Hungría.
La parte de la nota sobre Ucrania es una resumida versión del artículo escrito por Josh Cohen para Foreign Policy (‘Los historiadores blanquean el pasado de Ucrania’), que fue publicada el 2 de mayo de 2016. El medio español da el enlace, pero no menciona la revista estadounidense.
El autor de la nota de El Confidencial compara a los Institutos de la Memoria nacional de Ucrania y Polonia con los “ministerios de la Verdad” del libro “1984” de George Orwell.
También usa la frase “varios expertos -ajenos por completo a la campaña propagandística rusa- han denunciado que este movimiento de Kiev tiene un doble objetivo” sin mencionar los nombres de los expertos.
En el comentario para StopFake el director del Instituto de la Memoria Nacional, Volodymyr Viatrovych, dijo que “la campaña mediática para desacreditar al Instituto se empezó en mayo de este año con la publicación de Josh Cohen en la revista estadounidense Foreign Policy”.
Viatrovych afirmó que hasta ahora está intercambiando cartas con la edición de Foreign Policy para que publiquen su respuesta a las acusaciones y que le prometieron una pronta publicación de ella.
Aun así su respuesta fue publicada por el medio ucraniano en inglés, Kyiv Post, que publicó tanto la nota de Cohen como la respuesta de Viatrovych.
El historiador ucraniano notó que después de la publicación en FP, empezaron a aparecer notas parecidas a la de Cohen, pero como si fueran artículos independientes.
¿La parte de la nota de El Confidencial es también un recuento de este tipo?
Así en la nota de El Confidencial dice: “La institución se encargará a partir de ahora en exclusiva de estudiar estos documentos. Y de determinar quién puede acceder a ellos.”
Pero Viatrovych nos explica que solamente recientemente el archivo de los servicios de seguridad ucraniana (SBU) se empezó a abrir.
“Es fácil de comprobar porque aparecieron muchas publicaciones y todos los que querían pudieron trabajar con los archivos”, declaró el historiador sobre la primera década de 2000.
Además en la nota de El Confidencial se trata sobre una acusación por parte del profesor estadounidense:
“Las acusaciones se centran especialmente en el recién nombrado responsable del Instituto de la Memoria Nacional, el joven y polémico Volodymyr Viatrovych. Jeffrey Burds, profesor de historia rusa y soviética en la Universidad del Noreste, en Estados Unidos, no duda en acusarle de falsificar documentos históricos… A su juicio, el trabajo del historiador ucraniano es un «monumento a la limpieza y la falsificación» que elimina «todo lo que critique al nacionalismo ucraniano», así como «registros de atrocidades».
En su respuesta para Kyiv Post, Viatrovych dice que no sabe de qué trabajo se trata:
“Tomando la parte de Jared McBride con el título “revelado” ‘Cómo el nuevo comisario de la memoria de Ucrania está controlando el pasado de la nación’. Esto fue después de leer el artículo de Jeffrey Burds donde no solamente descubrí mis “falsificaciones y censura”, sino que también aprendí que hay mucha “falsificación” que se puede encontrar en un libro de 898 páginas, cuyo nombre él no menciona”, escribió V. Viatrovych para Kyiv Post.
Él afirma que las obras que hasta ahora había escrito son muy fáciles de encontrar hasta en Wikipedia y no hizo ningún trabajo de 898 páginas.
“Es más Jeffrey Burds nunca me había contactado y tampoco nunca trabajó con el archivo de SBU (Servicio de Seguridad de Ucrania) en Ucrania”, añadió Viatrovych en su comentario para StopFake.
Respondiendo a otras acusaciones de la nota de Josh Cohen, Viatrovych afirma que tiene una carta por parte del historiador canadiense sobre el acceso al archivo.
“Además estaba sorprendido con las palabras del historiador canadiense Marco Carynnyk sobre su problema con el acceso al archivo de SBU, cuando yo era el director. Puede ser que Cohen no entendió sus palabras, porque tengo una carta de Marco (quien, espero, me perdone por publicar su correspondencia privada desde 2010): “Sabe, que aún no estoy de acuerdo con su evaluación de algunos aspectos de la historia ucraniana; pero siempre estaré agradecido a Ud. porque el año pasado me diste el acceso al archivo de SBU”. Y eso no fue un trato de preferencia. Cuando encabezaba el archivo de SBU la gente por primera vez pudo experimentar un acceso igualitario”, añadió Viatrovych en su respuesta publicada en Kyiv Post.
En su respuesta a la nota publicada por Foreign Policy, Viatrovych también mencionó que el artículo de Josh Cohen tiene varios errores y distorsiones sobre su biografía.
Viatrovych agrega que nadie de El Confidencial le pidió nunca hacer un comentario.