Mientras el mundo intenta recuperarse del impacto de la victoria de Donald Trump en la carrera presidencial, los rusos están observando a los Estados Unidos con renovada confianza de que años de lucha contra la supremacía de los medios liberales de Occidente en los flujos de información global finalmente han dado frutos, informa Global Voices.
En este ámbito, quizás nadie esté más contenta que Margarita Simonyan, editora en jefe de RT (antiguamente “Russia Today”), el más grande medio de propaganda del Kremlin, concebido para proyectar la visión del mundo de Moscú al público extranjero.
En Twitter, Simonyan comenzó la jornada electoral como la mayoría confiando en los pronósticos de las encuestadoras, esperando la victoria de Hillary Clinton. Uno de los primeros tuits publicados por Simonyan el día de la elección simplemente declaraba que la democracia había muerto.
Cuando resultó evidente que Trump en realidad ganaría la contienda, el tono de Simonyan en Twitter pasó de la desolación a la alegría. Ella incluso comenzó a buscar una bandera estadounidense, y prometió atarla a su auto, tan dispuesta estaba de rendir homenaje a una elección que horas antes había descrito como un presagio del fin de la democracia.
Ni siquiera las dos cajas de cerveza que debe, al parecer el precio por haber perdido la apuesta que hizo por Clinton, no alcanzaron a empañar el ánimo de la editora jefe.
Al igual que muchos observadores en los Estados Unidos y en todo el mundo, Simonyan ha interpretado la victoria de Trump como un fuerte reproche a la situación actual y a décadas del llamado Consenso de Washington, en materia de política exterior estadounidense.
Para Simonyan, esto demuestra que la mayoría de los votantes estadounidenses están hartos de los medios tradicionales, del multiculturalismo, del libre comercio y del intervencionismo extranjero.
Implícita en los festejos de Simonyan en Twitter está la idea de que RT, el medio al que pertenece, también es un ganador, ya que ofrece la perspectiva antisistema que aparentemente ha prevalecido en estas elecciones en Estados Unidos.
Destacados seguidores de Hillary Clinton también han adoptado la idea de que agentes rusos como Simonyan han sido los responsables de la victoria electoral de Trump.
Por ejemplo, Michael McFaul, ex embajador de Estados Unidos en Rusia y ferviente partidario de la campaña de Clinton, le atribuyó a Moscú el haber manipulado a los estadounidenses para que voten por Trump. En Twitter, McFaul felicitó en broma a varios individuos vinculados al Kremlin, incluso a Simonyan, que rápidamente retuiteó el mensaje en su propia cuenta.
De cara al futuro, Simonyan claramente tiene muchas esperanzas respecto a lo que el presidente Trump puede hacer para mejorar las relaciones ruso-estadounidenses, incluyendo varias concesiones geopolíticas a Moscú que probablemente serían impensables si el martes la ganadora hubiera sido Hillary Clinton.
¿Y qué podemos decir de “QEPD la democracia”? Según Simonyan hay buenas noticias en ese aspecto:
Autor: Kevin Rothrock
Traducido por Cecilia Cárdenas
Fuente: Global Voices.
