La propaganda rusa difunde periódicamente portadas falsificadas del semanario francés para subrayar esta u otra narrativa de su propia desinformación. Dicha portada dedicada a Jarlán en realidad no existe.

Los usuarios de las redes sociales al igual que los medios de comunicación han difundido la noticia de que el semanario satírico francés, Charlie Hebdo, supuestamente ha colocado en la portada una ilustración dedicada a la reciente situación en el Campeonato Mundial de Esgrima de Milán. Entonces, la atleta de sable ucraniana, Olga Jarlán, se negó a estrechar la mano de su rival de Rusia, la cual perdió, por lo que inicialmente fue descalificada, y más tarde se canceló la descalificación, así como el apretón de manos obligatorio de las atletas.

Los medios del Kremlin escriben que habiendo retratado a Jarlán de una manera poco atractiva, “el semanario, de esta manera, se burló de ella”.

Captura de pantalla “Charlie Hebdo se ha burlado de la esgrimista ucraniana”  – news.ru
Captura de pantalla – twitter.com

En realidad, se trata de otra falsificación de la propaganda rusa. En la web de Charlie Hebdo se pueden ver todas las tiradas anteriores de la revista. Sin embargo, la portada mencionada por las fuentes rusas está ausente en el archivo. En cambio, la revista ridiculiza muy a menudo al presidente de la Federación Rusa, lo que los medios de comunicación rusos pasan por alto. Las cuentas de las rede sociales de la revista tampoco cuentan con la portada de Jarlán.

Captura de pantalla – charliehebdo.fr

Recordemos que la ucraniana Olga Jarlán derrotó a la rusa Anna Smirnova en el inicio del Campeonato Mundial de Esgrima de 2023 celebrado en Milán. Después del combate, Jarlán se negó a estrechar la mano de Smirnova mientras sostenía su sable frente a ella y fue descalificada por hacerlo. Más tarde, se suspendió la decisión de descalificación y el jefe del Comité Olímpico Internacional (COI) dijo que a Jarlán se le permitiría competir en los próximos Juegos Olímpicos. La negativa a estrechar la mano de la rusa provocó una oleada de reacciones negativas en los medios rusos, así como una serie de noticias falsas sobre este tema.