El mapa, promovido por los medios rusos como «un plan para apoderarse de nuevos territorios por parte de Turquía», fue publicado en 2009 por el politólogo estadounidense George Friedman en su libro Los próximos 100 años: un pronóstico de los acontecimientos del siglo XXI (en inglés – The Next 100 Years: A Forecast of 21st Century Events). La figura no muestra «nuevos territorios de Turquía», sino la posible expansión de la influencia política de Ankara en los países árabes y europeos.
Los medios rusos continúan desinformando activamente sobre las relaciones entre Ucrania y Turquía, así como sobre las relaciones entre Ankara y el Kremlin. El 12 de febrero, los medios pro-Kremlin informaron que «Turquía ha revelado planes para apoderarse de Rusia». Se informa que la televisión estatal turca supuestamente reveló un mapa que muestra los Estados y sus tierras, de los que “Turquía pretende aumentar sus propios territorios». Entre ellos están los territorios ocupados de Ucrania: Crimea y Donbás.
La noticia falsa fue difundida por Ura.ru, Tsargrad, KP.ru, ForPost y PolitInfo.
En realidad, el canal de televisión turco no discutió «planes para apoderarse de nuevos territorios», sino la posibilidad de expandir la influencia política de Turquía en los países vecinos. El mapa, presentado por los medios rusos como el «plan secreto» de Ankara, fue publicado en 2009 en un libro de George Friedman, politólogo estadounidense y jefe de la agencia de inteligencia privada de Stratfor. En su opinión hasta el 2050, Turquía se convertirá en el jugador geopolítico más fuerte y expandirá su esfera de influencia tanto al mundo árabe como a los países europeos: este es el pronóstico que se mostró en el mapa (vídeo de 00:25:40). La predicción de Friedman no mencionó la incautación de tierras extranjeras por parte de Turquía.
“De hecho, Turquía disfruta de una de las ubicaciones geográficas más sólidas de cualquier país euroasiático. Turquía tiene fácil acceso al mundo árabe, Irán, Europa, la antigua Unión Soviética y, sobre todo, el Mediterráneo. La economía turca crece en parte porque Turquía es un centro de comercio regional, así como una potencia económica productiva por derecho propio. […] Cuando los rusos finalmente colapsen, los turcos quedarán en una posición en la que no han estado en un siglo. Rodeados de caos y debilidad, los turcos tendrán presencia económica en toda la región. También tendrán una presencia militar sustancial. Cuando los rusos colapsen, la geopolítica regional se reorganizará, sin un esfuerzo real por su parte, en torno a los turcos, que se convertirán en la potencia dominante en la región, proyectando influencia en todas direcciones”, dice en el capítulo 8 del libro, dedicado a Turquía (p. 144-148).
Turquía varias veces ha dicho que no apoya la ocupación de Crimea por Rusia y no ha expresado reclamos territoriales sobre la península. La última vez que las autoridades turcas lo declararon fue en diciembre de 2020: el entonces ministro de Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, reafirmó que Ankara continúa con su política de no reconocimiento de la ocupación de la península de Ucrania.
Las autoridades turcas también destacan que la prioridad para Turquía es respetar los derechos del pueblo tártaro de Crimea, que están siendo violados masivamente por el Kremlin en la península:
«La prioridad de Turquía sigue siendo garantizar que los tártaros de Crimea que viven en Crimea continúen viviendo con prosperidad y seguridad en su patria histórica, para poder defender su identidad cultural y poner fin a su sufrimiento como resultado de la ocupación«, se trata en un comunicado del MAE de Turquía.
La primera vez que la narrativa del Kremlin de que Turquía supuestamente considera a Crimea como su propio territorio y «sueña con recuperar la península» apareció, fue en el otoño de 2020, y desde entonces la desinformación se ha complementado activamente con nuevas noticias falsas y ha sido promovida por los medios rusos.